Esta receta es buena para aprovechar un arroz blanco que nos haya sobrado. La receta original lleva rúcula, pero a mi no me gusta porque le da un gusto muy amargo a este plato. La pueden sustituir por unas hojas de acelgas o espinacas.
Una taza de arroz blanco cocido
1 calabacín (zuchini, zapallito)
2 dientes de ajo
1 taza de hojas de acelga o espinacas
1/2 taza de queso amarillo rallado
3 huevos
4 cucharadas de crema de leche (o leche)
2 cucharadas de mantequilla
1 cucharada de aceite, sal y pimienta.
Al calabacín se le cortan las puntas, se lava y se ralla (si tienen un procesador de alimentos mejor)
En una sartén se echa el aceite y se fríe el calabacín con los ajos picados, a fuego vivo. Salpimentar, remover y retirar del fuego y reservar. Se lavan los vegetales se secan con papel absorbente y se pican finamente.
Se coloca el arroz cocido en un bol. Se añade el vegetal elegido picado y el calabacín. Se remueve para que se mezcle bien. batir los huevos con la crema de leche, o la leche, incorpore el queso, sal y pimienta. Se vierte la mitad de este batido sobre la mezcla de arroz y verduras, remover bien.
Se enmantequilla un molde desmontable y se rellena con la preparación. Se cocina en un horno precalentado a 200º C (375º F) 30 minutos, se saca y se le pone por encima el resto del batido que habíamos reservado. Se vuelve a meter al horno durante 20 minutos. Se desmolda y se sirve.
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